Confunden una pista de hielo con una Villa Navideña
El priísmo y sus compinches recurren a las más viejas prácticas de ese partido en vías de extinción, cuando se sienten acorralados y derrotados, denostar, tratar de confundir, solo que no han tomado en cuenta un detalle, no es la misma ciudadanía que siempre engañaban, esos tiempos han terminado.
De forma desesperada recurren a un presunto acto de corrupción con lo que han llamado una “pista de hielo”, que en lo práctico había costado mucho más que lo que pagó el Ayuntamiento de Cancún por lo mismo.
Solo que omiten un detalle; no fue una “pista de hielo” como la de Cancún, fue una Villa Navideña. No. No es lo mismo. Una villa navideña comprende juegos y otras atracciones. Es decir, la mentada pista de hielo se vuelve un complemento, no la atracción central.
Mientras que en Cancún el atractivo, fue simple y llanamente la pista de hielo. Eh ahí la pequeña gran diferencia. Pero como hay que hacer escándalo mediático, se recurre a actos bajos, como era de esperarse del PRI.
Y usaron a viejos personajes mercenarios de la política. Un Alejandro Cuevas Mena y un Eduardo Sobrino Sierra. Ambos dinosaurios del viejo régimen; alborotadores a sueldo. Equiparables con golpeadores a sueldo como el Calín, u otros funcionarios de cuarta, como Orlando Pérez Moguel, alias el “centavo”. Basta con darles unos buenos fajos de dinero para que sean capaces de vender a su propia madre.
Atribuyen denuncia penal, atribuyen no saber a qué instancia dirigirse para hacer esa denuncia. Un diputado local, atribuye no saber cómo proceder, !Vaya políticos que tenemos, vaya diputado local!, que triste es para Yucatán que nuestros políticos sean capaces de todo por dinero.
Alejandro Cuevas, eso que usted llamó “show de luces” fue una villa navideña, que era el espectáculo central, que contenía la pista de hielo, no un simple “show de luces”, hable de ello con todas sus palabras.