La Fiscalía mexicana acusó al expresidente Enrique Peña Nieto de “traicionar a la patria” por estar involucrado en una trama de corrupción relacionada con la constructora brasileña Odebrecht.
De acuerdo con la agencia Europa Press, los fiscales señalaron que el exmandatario jugó un “papel central en la comisión de los delitos de cohecho, traición a la patria y delito electoral, lo que puede asumirse sobre la base de proposiciones empíricas generales”.
El exmandatario, de 54 años y residente en España, habría cometido los ilícitos “utilizando como instrumento” a dos altos cargos que lo acompañaron desde la campaña electoral para llegar a la Presidencia, Luis Videgaray, exministro de Hacienda y Exteriores, que reside ahora en Estados Unidos, y Emilio Lozoya, que fue director de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), detenido en España en febrero de este año y extraditado a México.
Según el texto de la Fiscalía, el expresidente “contaba con su propio aparato de poder criminal, con cuya ayuda implementó una estrategia de cooptación de la voluntad de los legisladores encargados de la aprobación de sus reformas estructurales en materia energética”, aprobada en diciembre de 2013.
El delito de cohecho se habría cometido cuando, por supuestas órdenes de Peña Nieto, Videgaray distribuyó “a través de interpósitas personas” 121.5 millones de pesos, entre legisladores del Congreso. Los destinatarios habrían sido un legislador del PRI, David Penchyna, y tres del opositor Partido Acción Nacional (PAN), Ernesto Cordero, Jorge Luis Lavalle y Ricardo Anaya.
Los gerentes de Odebrecht declararon a la Fiscalía de Brasil, bajo la figura de “delación premiada” para aminorar sus penas, acerca del pago de 10,5 millones de dólares para la campaña de Peña Nieto en 2012, y la obtención de contratos con la petrolera estatal Pemex cuando se convirtió en presidente.
Videgaray se desempeña actualmente como profesor del Instituto Tecnológico de Massachusetts en el noreste de Estados Unidos, donde en septiembre pasado algunos alumnos exigieron su destitución por carecer de “autoridad moral”, pero la institución académica descartó la petición.
Durante su tradicional conferencia de prensa del miércoles 11 de noviembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que la Fiscalía “ya se tardó” con el caso de corrupción que vincula a la élite de Peña Nieto y Videgaray. Sin embargo, reiteró su confianza en el fiscal Alejandro Gertz Manero, a quien calificó como “un hombre íntegro y recto”.
“Tenemos que actuar con responsabilidad y tener confianza en el trabajo que está haciendo la Fiscalía. Yo aquí aprovecho para decir que le tengo confianza al Fiscal. Quisiera yo, pero entiendo que no es posible a veces, que se avanzara más rápido. Ahora sí que justicia pronta y expedita porque se están tardando, pero le tengo confianza al Fiscal”, dijo .
“Ya ha pasado tiempo, sin embargo, hay esa confianza que es muy importante. La justicia tarda, pero llega. En eso confío. También que no haya venganzas, que no haya juicios sumarios, que no se inventen delitos, que todo sea de acuerdo a la ley, que se presenten pruebas, que no sea un espectáculo, lo que hacían antes”, enfatizó López Obrador.
*Con información de Europa Press