La explosión de una bomba de oxígeno ha provocado casi un centenar de muertos y varios heridos por asfixia y otras causas en el hospital Al Husein de la ciudad de Nasiriya, en el sur del país.
El Departamento de Salud de Di Qar, provincia en la que se encuentra Nasiriya, anunció que “el número de muertos por el incendio en el Hospital Iman Husein ha aumentado a 92”, según informó la agencia de noticias estatal iraquí, INA.
Las primeras pesquisas indican que el incendio se produjo por la explosión de una bombona de oxígeno en el centro de salud destinado a aislar a los pacientes infectados por el coronavirus y perecieron por asfixia y otras causas, según la televisión estatal Al Iraquiya.
Asimismo, los medios locales informaron que la deflagración de ayer se produjo a raíz de un cortocircuito en las instalaciones, que carecen de sistemas de prevención de incendios como detectores de humo.El presidente iraquí, Barham Saleh, afirmó en su cuenta de Twitter que “el desastre del hospital Al Husein en la provincia de Di Qar y previamente, en el hospital Ibn al Jatib, en Bagdad, es resultado de la corrupción y la mala gestión que subestima la vida de los iraquíes e impide el desempeño de las instituciones”.
Saleh hizo referencia también a la tragedia que ocurrió el pasado abril en el hospital de Al Jatib, en el sureste de la capital Bagdad, cuando también explotaron bombonas de oxígeno destinadas a los enfermos de covid-19, provocando un gran incendio que causó la muerte de 82 personas y heridas a más de un centenar.
Asimismo, las autoridades iraquíes han abierto una investigación y el Tribunal de Investigación de Di Qar ha emitido órdenes de arresto contra trece empleados del departamento de Salud de la provincia, incluido su director, según informó INA.Entre los muertos habría tres trabajadores sanitarios, según un informe de la agencia oficial de noticias iraquí Nina.